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Por instrucciones del Presidente municipal, el regidor primero supervisa el desbloqueo de los drenajes tapados.
Los desechos inorgánicos que la población arroja a las calles, combinados con la tierra que con las corrientes de lluvia se cuela por los registros, han provocado que las tuberías del drenaje se azolven y los usuarios se queden sin este indispensable servicio sanitario en la cabecera municipal de Texistepec.
Por ello, el Ayuntamiento que preside el ingeniero Saúl Reyes Rodríguez ha instruido al personal del departamento de Obras Públicas que oportunamente con equipo y herramientas tradicionales atienda las quejas de los vecinos afectados por este grave problema de sanidad en la red de drenaje de ese sector que se introdujo en la primera administración que encabezó el actual munícipe en el período 2008-2010.
Un botón de muestra es el caso de los moradores de la colonia Rubén B. Domínguez, a quienes se les obstruyó el drenaje en un tramo de la calle Pípila y eso provocó que las aguas negras salieran a la superficie de esa arteria vial pavimentada y generara no sólo una pestilencia nauseabunda sino un latente foco de infección que, incluso, llegó hasta un pozo artesiano.
A tono con la atención oportuna y las instrucciones del munícipe, el regidor primero Cándido Cruz Fernández, encargado de las comisiones del ramo de drenaje, agua potable y obras públicas, personalmente supervisa los trabajos de desazolve y reparación de las tuberías del drenaje que se iniciaron desde la semana pasada, con el fin de que los vecinos cuenten con este servicio y se prevengan enfermedades provocadas por falta de sanidad.
Los empleados municipales que desazolvaban el registro de la calle Pípila casi esquina con Rubén B. Domínguez, abundaron que en el interior encontraron bolsas y envases de plástico, así como arena y lodo, motivo por el que tanto ellos como el regidor del ramo exhortaron a la ciudadanía a no arrojar basura inorgánica a la calle porque luego es arrastrada por las corrientes de agua pluvial a los drenajes.
